Porque sè y no sè.
Porque ni siquiera entiendo lo que sè.
Porque ni siquiera sè lo entiendo.
Y bueno... sin embargo leer entre lìneas no me queda tan difìcil,
aunque las cosas no siempre sean lo que parecen...
Es un poco difìcil acostumbrarse a esta situaciòn.
Es, la de saber y no saber, la de entender, argumentar...
Es èse sentimiento de tenerte y a la vez, saber que me acecha tu aucencia (mi soledad) desde que te conozco.
Adentro soy fuerte y no lloro, sin embargo, cuando salgo, soy dèbil ante el mundo, porque el mundo me ha hecho asì.
Dèbil ante casi todo. Y bueno.. sabemos todos muy bien, este mundo ya no està hecho para personas dèbiles.
Es posible que ya no quepa. Como tambièn es probable (màs no imposible) de que sea el mundo el que no quepa en mì.
¿Què tiene de malo querer llorar de vez en cuando?
Desde que no estàs acà, me queda difìcil hacerlo. Casi imposible...
Tal vez lo olvidè. Tal vez se me olvidò lo que se siente al llorar, porque me hiciste de piedra al irte. Cuando te marchaste sin decir siquiera "adios", el sentir me llegò tarde. Desde esa tarde, el sentir me llega tarde.
Desde ahì, he llorado pocas veces, porque bueno... no me verà el mundo, ni el espejo llorarte una sola làgrima.
Porque ya te fuiste, y porque hoy recuerdo que tu tambièn lloraste.
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